Tras imponer el teletrabajo, empleados quieren acabar con el “9 am a 6 pm”

En BFM Business, Benoît Serre, vicepresidente de la asociación nacional de DDH, dice que ve surgir esta tendencia “preocupante” para las empresas.

Para muchos empleados, el regreso a clases se hizo bajo el signo de la preocupación por la situación geopolítica y sus consecuencias en la economía y la inflación. Sin embargo, muy lúcidos sobre la transformación del mercado laboral y la inversión del equilibrio de poder con las gerencias, los empleados, en particular los ejecutivos, no pierden de vista sus demandas de cambio.

La generalización de una dosis de teletrabajo es ya un logro en muchas organizaciones. “Casi el 30% de los puestos de trabajo en Francia son ‘teletrabajo’ y de estos, una gran parte ya está en modalidad de teletrabajo elegida por las empresas, la gran mayoría dos días a la semana”, explica en BFM Business, Benoît Serre, vicepresidente de la Asociación Nacional de DDH (ANDRH).

A partir de ahora, van surgiendo nuevas aspiraciones, que siguen y siempre forman parte del deseo de conciliar mejor la vida profesional y la vida personal. “Por otro lado, hay una demanda bastante fuerte de una mejora en la libertad de organización en mi trabajo”, continúa el gerente.

Un modelo que se desvanece

“Es bastante preocupante. El modelo que hemos conocido durante cien años, de 9 am a 6 pm, está desapareciendo para toda una gama de oficios”.

Ya no tiene ninguna razón de existir. Los empleados dicen: durante los confinamientos, trabajamos diferente para poder trabajar diferente”, subraya Benoît Serre. Y para advertir: “tenemos un poco esa presión ahí y una forma de impaciencia de los empleados para decir: vivimos, por qué no ¿Transformas tu organización? Estamos preparados para ello”.

Esta aspiración también se refleja en el último barómetro Cadremploi elaborado por Ifop. Al 52% de los ejecutivos encuestados les gustaría que se adaptaran los horarios de trabajo.

“El trabajo ya no se beneficia de un lugar central alrededor del cual organizamos nuestra vida diaria y nuestros proyectos. Actualmente estamos en la lógica opuesta: ¡el trabajo, y a fortiori el empleador, deben adaptarse! Por ejemplo, parece que el teletrabajo ahora es un hecho. ejecutivos, ya no es una ventaja incorporarse o permanecer en una empresa, lo que ahora buscan es la libertad de elegir su lugar de trabajo y administrar su tiempo como lo deseen, está por ver cómo las empresas podrán hacer frente a estos nuevos requisitos”, comenta Carole Ferté, Directora de Estudios de Cadremploi.

El CDI ya no es el Grial

Otra ilustración de la inversión de este equilibrio de poder, el asalariado y la CDI ya no son considerados el Santo Grial. En todo caso para determinadas profesiones muy en tensión.

“Vemos aparecer esta tendencia en raras profesiones donde la gente ha entendido que la empresa los necesita, es cierto en las profesiones tecnológicas. Y se dicen a sí mismos: prefiero vender mis servicios (a través de un contrato comercial, Nota del editor) y mantener mi libertad y no estar sujeto a los condicionantes de la CDI, no es mayoritario pero sentimos que es un movimiento que se está creando sobre los oficios tecnológicos, que son raros y que se pueden hacer a distancia”, explica Benoît Serre.

Olivier Chicheportiche Periodista BFM Negocios

Leave a Comment

Your email address will not be published. Required fields are marked *