
Sociólogo de combate conocido por su trabajo sobre las categorías más ricas de la población francesa, del que fue coautor durante casi medio siglo con su esposa Monique Charlot (estamos hablando del “Pinçon-Charlot”), Michel Pinçon falleció el 26 de septiembre, a la edad de 80 años, a causa de las consecuencias de la enfermedad de Alzheimer, según informa una nota de prensa de su editor, La Découverte.
Si la pareja de sociólogos dejó tal impresión, fue tanto por la radicalidad de sus análisis sobre las élites burguesas como por el singular tándem que formaban. Convencidos de que su “carrera no habría sido posible sin los demás”Monique Charlot subrayó que esto fue el resultado de “dos neurosis de clase invertida”. Ella procedía de un entorno acomodado pero poco ilustrado -una notoriedad provinciana- cuando él procedía de un entorno modesto en el que forjó una cultura exigente para sí mismo.
Nacido en Lonny, en las Ardenas, el 18 de mayo de 1942, de padre pulidor y madre limpiadora, Michel Pinçon sólo ve un futuro gracias a la escuela (escuela secundaria en Mézières, bachillerato en Charleville) y a la lectura, a través de la cual adquiere una rica cultura personal. Pero sin sacar alegría ni entusiasmo de ello, preocupándose por ser “un pobre chico todo [s]por vida ” si el éxito debe alejarlo de la cultura de sus padres, “mientras lo impulsa hacia un extraño cuyo [il] no se los codigos”.
A ella la segregación urbana, a él el mundo laboral
La salvación del joven que se sentía mal consigo mismo vino de Lille en 1965. Fue en la facultad de letras y ciencias humanas donde Michel Pinçon, que había seguido allí las clases de sociología de Pierre Bourdieu durante dos años, conoció a Monique Charlot, joven sociología estudiante, también. Ella tenía 19 años, él 23. Se casaron en septiembre de 1967 para poder ir juntos a Marruecos, donde Michel estaba haciendo el servicio militar, como parte de la cooperación, como profesor de francés.
Allí estudian conjuntamente la sociedad marroquí, en la línea de la obra de Bourdieu. Pero la firma compartida no es apropiada en la universidad: la memoria a dos voces que componen bajo la dirección de Jean-Claude Passeron, entonces cercano a Bourdieu, es finalmente rechazada por la Universidad de París-Vincennes. Sin desmontar, los dos investigadores cortaron su suma en dos memorias distintas, pero siamesas, que sustentan el mismo día 2 de septiembre de 1970.
En la pareja, cada uno tiene su opción: a ella la segregación urbana, a él el mundo laboral. Solo Michel Pinçon examina la evolución de la industria metalúrgica en el valle del Mosa y sus repercusiones sociales. Si sacan el carné del Partido Comunista Francés, se alejan de la militancia desde el nacimiento de su hijo, en 1974.
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