Para controlar el gasto en seguridad social, el gobierno prevé 1.100 millones de euros de ahorro en medicamentos y dispositivos médicos en 2023. Los industriales estiman que se verán perjudicados por una suma de 3.500 millones de euros. euros y pedir al ejecutivo que revise su copia.
Big Pharma comienza un enfrentamiento contra el estado. Por calculadoras interpuestas. En cuestión: el, presentado este lunes por el Gobierno, que prevé un ahorro de hasta 1.100 millones de euros en medicamentos y productos sanitarios el próximo año. En total, la dotación destinada al gasto en medicamentos se fija en 24.600 millones de euros en 2023, frente a los 26.400 millones de 2022. Son 1.800 millones menos, es decir, el famoso ahorro de 1.100 millones dirigido a los fabricantes, a los que se suman 720 millones de esfuerzos del lado del Seguro de Salud para regular mejor la pertinencia de la atención y las recetas. “Esta cantidad (…) parece fijada a sabiendas por debajo de las necesidades de la población”, protesta la Leem, la Federación de empresas farmacéuticas, en un comunicado de prensa publicado este martes, tras una reunión de su comisión de cuentas.
En , el ahorro previsto por el Estado provendrá de 900 millones de euros en rebajas de precios negociadas con las farmacéuticas en productos sanitarios reembolsables. Además, se recuperarán 200 millones de euros a través de la famosa “cláusula de salvaguardia”, un mecanismo de aportación que pagan los fabricantes a los seguros de salud cuando su facturación supera un determinado umbral fijado por la ley de financiación de la seguridad social. Pero para Leem, que hizo sus propios cálculos, la factura será mucho más alta de lo anunciado. “Las cifras que presenta el gobierno son deshonestas”, se indigna dentro de la federación.
Juego de manos sobre la “cláusula de escape”
Porque allí la cláusula de salvaguardia está totalmente infravalorada. De hecho, en línea con el crecimiento neto de su actividad en los últimos tres años (+6% anual), impulsado por costosas terapias innovadoras, los fabricantes esperan registrar unas ventas netas de 28.000 millones de euros en 2023. Es decir, un superávit de 3.400 millones de euros respecto al límite fijado por el PLFSS.[…]